¿Qué son las mamas fibroquísticas?
Los pacientes a menudo preguntan cómo deben sentirse los senos normales. La verdad es que lo “normal” varía para cada mujer y cada seno. Lo más importante es familiarizarse con su propio cuerpo y establecer cómo se sienten y se ven sus senos para que pueda notar fácilmente los cambios.
Los cambios fibroquísticos en los senos son una afección común y benigna (no dañina) que experimenta aproximadamente la mitad de las mujeres. Muchas mujeres con senos fibroquísticos no tienen síntomas, sin embargo, algunas mujeres experimentan dolor, sensibilidad o bultos en los senos. Estos cambios son normales, pero si encuentra un bulto nuevo o en crecimiento o engrosamiento de la piel, empeoramiento del dolor en los senos o cambios que persisten después de su período, debe consultar a su médico.
Una vez que se familiarice con su normalidad, tendrá el poder de crear opciones de estilo de vida que promuevan la salud, la curación y el cuidado personal. Siga leyendo para saber cómo vivir más cómodamente con el cambio fibroquístico en los senos.
Los cambios fibroquísticos en los senos son una afección común y benigna (no dañina) que experimenta aproximadamente la mitad de las mujeres. Muchas mujeres con senos fibroquísticos no tienen síntomas, sin embargo, algunas mujeres experimentan dolor, sensibilidad o bultos en los senos. Estos cambios son normales, pero si encuentra un bulto nuevo o en crecimiento o engrosamiento de la piel, empeoramiento del dolor en los senos o cambios que persisten después de su período, debe consultar a su médico.
Una vez que se familiarice con su normalidad, tendrá el poder de crear opciones de estilo de vida que promuevan la salud, la curación y el cuidado personal. Siga leyendo para saber cómo vivir más cómodamente con el cambio fibroquístico en los senos.
El cambio fibroquístico del seno afecta el tejido del seno de dos maneras: causando un tejido fibroso grueso similar a una cicatriz, llamado fibrosis, y sacos llenos de líquido, llamados quistes.
No sabemos exactamente qué causa los senos fibroquísticos. Los investigadores creen que una causa puede ser los cambios hormonales que experimenta cada mes con su ciclo menstrual, y que el exceso de estrógeno puede ser lo que causa los senos fibroquísticos. Los investigadores sospechan que también es la razón por la cual las mujeres desarrollan senos fibroquísticos mientras reciben terapia de reemplazo hormonal.
La mayoría de las mujeres diagnosticadas con senos fibroquísticos tienen entre 20 y 50 años. Los senos fibroquísticos después de la menopausia son raros porque las mujeres posmenopáusicas experimentan menos fluctuaciones hormonales. La excepción son las mujeres que reciben terapia de reemplazo de estrógenos. Estas mujeres a veces experimentan una recurrencia de sus síntomas de senos fibroquísticos, o incluso los desarrollan por primera vez.
No hay cura para los senos fibroquísticos, pero tampoco hay razón para sufrir. Si sus síntomas son disruptivos, usted y su médico pueden personalizar un plan de tratamiento que lo haga sentir más cómodo.
El primer paso y el más importante es comprender sus síntomas, riesgos y diagnóstico. Si encuentra bultos, dolor, sensibilidad o secreción inusuales durante un autoexamen, hable con su médico acerca de sus síntomas.
Cuidarse a sí misma y a sus senos significa hacerse mamografías de detección anuales y exámenes clínicos de los senos si tiene 40 años o más. Su médico puede ordenar una mamografía de diagnóstico o una prueba de detección adicional, como una ecografía, para detectar mejor los cánceres, que pueden parecerse al tejido fibroso del seno en una mamografía.
Aunque es tentador entrar en pánico cuando siente quistes en sus senos, el cambio fibroquístico en los senos no es cáncer y no aumenta su riesgo de cáncer. Sin embargo, el tejido mamario denso, que a veces acompaña a los cambios fibroquísticos, se ha relacionado con un mayor riesgo de cáncer.
Los quistes tienden a aumentar de tamaño o brotar alrededor de una semana antes de su período, durante lo que se llama la fase lútea. En la mayoría de los casos, los quistes mamarios y el dolor mamario se resolverán una vez que comience su período. Si siente un bulto o una masa acompañada de síntomas como secreción del pezón, sarpullido, hinchazón, calor en los senos, hoyuelos o arrugas en la piel, comuníquese con su médico.
Si le diagnostican senos fibroquísticos, su médico podría ordenar una mamografía de diagnóstico. Si ya está lidiando con el dolor o la incomodidad de los quistes mamarios, una mamografía puede sonar como la cosa más dolorosa del mundo. Solis Mammography adoptó la revolucionaria tecnología SmartCurve, que está clínicamente probada para ofrecer una mamografía más cómoda para mujeres que han tenido mamografías dolorosas en el pasado y proporciona la precisión avanzada de la mamografía 3D.
Piense en su mamografía como una forma de cuidado personal, una forma de seguir cuidándose.
El tratamiento para el dolor fibroquístico de los senos depende de su nivel de malestar. Para muchas mujeres, el dolor es leve y breve. Esto se llama dolor cíclico y generalmente se intensifica justo antes de que comience su período.
A corto plazo, un antiinflamatorio de venta libre como el ibuprofeno puede aliviar la inflamación y reducir el dolor. Su médico también puede recetarle un control de la natalidad oral bajo en estrógeno o un tratamiento de progesterona, ya que los niveles altos de estrógeno se han relacionado con los senos fibroquísticos. Los remedios naturales también pueden proporcionar alivio. Nota: discuta cualquier remedio casero o suplemento con su médico antes de agregarlos a su rutina de salud.
Si los quistes mamarios se vuelven demasiado grandes y dolorosos, su médico también puede optar por drenarlos o, en casos muy raros, extirparlos.
Lo más importante es que usted es su mejor defensor de la salud. Hable con su médico si nota cambios repentinos o recurrentes en sus senos para que puedan asociarse con usted en el mejor curso de acción.