
Hay muchas razones por las que se realiza una prueba de perfil tiroideo. Puede ayudarle a averiguar lo que está ocurriendo con su glándula tiroidea y puede ayudarle a entender las opciones de tratamiento disponibles para usted. Los resultados de las pruebas tiroideas son importantes, pero no son lo único que le interesa a su médico. Otros factores son su salud actual y su historial médico. Independientemente del motivo de la prueba, es importante saber que siempre podrá obtener los resultados que necesita.
Normalmente, esta prueba mide la cantidad de TSH en la sangre, una hormona producida por las células tiroideas. Un nivel alto de esta hormona sugiere que su tiroides es poco activa, y un nivel bajo indica que tiene un problema. La prueba de TSH también mide el nivel de proteína tiroidea en la sangre. La ecografía es una prueba más avanzada que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para examinar el tiroides. Si tiene un nódulo o un tiroides agrandado, le harán esta prueba.
La ecografía tiroidea es la forma más precisa de determinar el funcionamiento de su tiroides. Esta prueba es también un sistema de alerta temprana. Un nivel alto de TSH significa que su tiroides es poco activo, mientras que uno bajo significa que su tiroides está produciendo la hormona en exceso. La glándula pituitaria también puede interferir con la estimulación de la tiroides y dar lugar a un nivel bajo de TSH. Por eso es tan importante la prueba del perfil tiroideo. Puede darle tranquilidad cuando tenga preguntas o cuando sea el momento de hacer un cambio.
La TSH es un indicador clave de la función tiroidea. Si tienes una TSH alta, tienes una tiroides poco activa. Cuando esta hormona está alta, su tiroides es hiperactiva. Si está baja, su tiroides puede no estar funcionando correctamente. Una TSH normal es una clara indicación de que su tiroides está funcionando correctamente. Si es demasiado baja, puede indicar que su tiroides no está funcionando correctamente.
Las pruebas de función tiroidea son una parte importante del diagnóstico de los trastornos tiroideos. Entender los diferentes tipos de pruebas tiroideas puede ayudarle a controlar mejor su enfermedad. Una prueba de tiroides mide el nivel de tres hormonas que el cuerpo produce, incluyendo la T3 y la T4 (la principal hormona de la tiroides). La TSH es la hormona responsable de la función tiroidea. Puede oscilar entre 0,4 y 4,0 miliunidades internacionales por litro de sangre.
Si tiene signos de enfermedad tiroidea, su médico puede recomendarle un panel tiroideo. Se trata de un conjunto completo de pruebas que evalúan la salud general de su tiroides. La prueba incluye tres pruebas diferentes para garantizar que está recibiendo el tipo de tratamiento adecuado. El panel tiroideo puede ser útil para diagnosticar una tiroides hipoactiva. La prueba también puede detectar una glándula tiroidea hiperactiva o hiperactiva. Si no está seguro, un nivel de TSH es el primer paso.